¿Cómo suplantan la falta de movimientos y gesticulaciones al momento de interpretar un papel en radio?
Se trata de no eliminar ningún movimiento, para hacer la actuación lo más orgánica posible. Entre poder tener movimiento, y apuntarle siempre al micro y no romper nada, hay que negociar para lograr la mejor actuación posible. Incluso en el teatro o en el cine, hay movimientos que no se pueden hacer. Digamos que hay que suplantar esa falta con imaginación y un poco de técnica.
¿Algún trabajo que recuerden por algo en especial?
Si, de los primeros que hice. Yo me había vendido como un tipo que hacía muchas locuciones, que grababa mucho, justamente para poder agarrar algún laburo. Y cuando me llamaron para efectivamente laburar, tenía un gran cagazo, y nos probaban a uno que era muy experiente y a mí. Una práctica muy común pero yo no lo sabía. El primer texto que probamos, el producer dice: «usemos la toma de él» (por el otro) Yo me dije a mi mismo: la cagamos, se dieron cuenta…
Después muchos también de los inicios, cuando grababa mucho con gente que hoy es amiga mía y le poníamos mucha pasión y ganas a cada cosa que hacíamos. De repente nos pasábamos horas para sacar una radio. Otras veces, yo iba muy apurado porque me escapaba de la EMAD, o de un rodaje de las ficciones de la tele que yo hacía; pedía para pasar rápido, grababa a los pedos y me iba de vuelta a la EMAD o al rodaje. Una locura.
En fin, recuerdos muchos, realmente, sobre todo de los comienzos, que creo que fue la etapa más intensa. Yo empecé a trabajar de golpe en mucha cosa después que decidí dejar de estudiar economía y dedicarme a la actuación. Y esa etapa fue realmente intensa y bella. Ingresar al mundo del teatro, la TV, el cine y la publicidad de golpe es algo fuerte. Lo disfruté mucho.
¿Cuándo sentís «pah! qué garrón esta guión que tengo que grabar»? ¿Y «pah, qué bueno me puede quedar este acting»?
Es un tema de feeling. Lo mismo que me pasa cuando leo un libreto o un guión. Me gusta o no me gusta, y pienso que ando bien ahí o no. El tema es que en la publicidad muchas veces, la mayoría, te enterás de lo que vas a grabar cuando estás ahí mismo, y no hay mucho arreglo. Pero, a esta altura, la mayoría de las cosas que aparecen están buenas. Algún garrón que otro aparece. Y bueno, está en uno también decir: hasta acá llego yo. A mí me ha pasado. Muy poco, un par o tres de veces, de decir: buscáte a otro para grabar esto. Esto también me ha traído un par de problemas, pero eso es lo que te va colocando en un mejor lugar también. Está bueno marcar distancia de lo que a uno lo incomoda. A veces el rumbo se toma por las cosas que uno rechaza.
¿Por qué creés que la gente odia escuchar su voz?
Bueno, básicamente porque estamos acostumbrados a escucharnos desde «adentro», y cuando nos escuchamos, lo hacemos de afuera, y con la intervención de la técnica, por lo cual, escuchamos algo diferente de la percepción que tenemos de nosotros mismos. Eso nos incomoda. Además, escucharnos grabados es algo artificial. No está en nuestra naturaleza, y eso también nos puede chocar un poco. Uno se escucha mientras habla. Escucharse mientras uno no está hablando puede sentirse raro cuando uno no está acostumbrado. Es como verse. Nos saca de nuestro equilibrio, y eso no nos gusta. Pero a mí no me pasa. Me gusta escucharme generalmente, si los equipos de grabación, edición y sonorización son buenos, no me jode para nada.